No es frecuente encontrar noticias relacionadas con temas científicos en la prensa diaria, a no ser que los hechos noticiosos afecten a la política o la economía del país al que éstas se refieran. De esta manera, la ciencia queda relegada a las publicaciones especializadas, en las que colaboran expertos en la materia, además de periodistas. Una de las principales razones de la ausencia de noticias científicas en los medios de comunicación es que éstas requieren que el lector corriente tenga unos conocimientos básicos sobre la materia para poder comprenderlas, o, en su defecto, requiere que sea el periodista quien tenga estas nociones mínimas para poder divulgar determinadas noticias. Por ello, el periodista se ve obligado a realizar una tarea de investigación y documentación que implica un gran esfuerzo por su parte.
Paralelamente a este hecho, se abre el debate sobre la responsabilidad del periodista a la hora de tratar temas sobre los que no es especialista, y nos lleva a preguntarnos sobre su legitimidad para abordar aspectos científicos. Sin embargo, la realidad es que, hoy en día, son los periodistas los que informan sobre ciencia y sobre todas las materias, aunque no siempre lo hagan acertadamente.
En España existen revistas, como Muy interesante o Quo, que pretenden acercar la ciencia a todas las personas, sin embargo, los reportajes que incluyen son de dudosa fiabilidad porque carecen de profundización en la temática tratada y se basan en estudios poco comprobados. La finalidad de estas revistas no es, por tanto, divulgar la ciencia estricta, sino despertar la curiosidad del lector a partir de noticias impactantes y sensacionalistas que causen interés por su extrañeza y desconocimiento.
Por otro lado, una de las publicaciones responsables que dedica un espacio amplio a la divulgación de la ciencia es La revista El Temps. Se trata de un semanario en catalán que realiza reportajes sobre temas de actualidad en materia de política, ciencia, medio ambiente, economía y sociedad. En el apartado de ciencia y tecnología siempre hay reportajes interesantes sobre la actualidad de los avances científicos. Dichas noticias están elaboradas por periodistas que realizan una tarea de documentación importante. El Temps intenta responder a los interrogantes básicos que se hace el lector no especializado y consigue que los temas resulten comprensibles sin caer en la vulgaridad.
Otro aspecto destacable es que la mayoría de las noticias de ciencia que aparecen en la prensa están relacionadas con el cambio climático, un tema que, más que científico es político, porque implica la negociación de las principales potencias mundiales con respecto a protocolos para evitar la contaminación. Lo que se divulga a cerca del climático es que causará perjuicios económicos y ambientales que afectarán a la economía mundial. Así que, en definitiva, lo que interesa del cambio climático no es tanto su lado científico como el hecho de que se haya convertido en un negocio para el mundo de las finanzas y la industria de las energías renovables, y consecuentemente, un tema que afecta a la política de los países industrializados.
